Tras el atentado contra la sede del Ministerio Público en Trujillo, el Gobierno anunció que las Fuerzas Armadas (FF.AA.) y la Policía Nacional del Perú (PNP) tomarán el control de esta ciudad, en el marco del estado de emergencia que rige en esa zona. La Presidencia de la República calificó el atentado como un “cobarde acto de terrorismo urbano” y condenó los ataques terroristas de bandas criminales, asegurando a la población que no descansarán ni flaquearán ante esos atentados.
El presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, afirmó que el Gobierno no permitirá que la criminalidad atemorice utilizando explosivos y prácticas terroristas en contra de la población. Anunció que los ministros del Interior, Juan José Santiváñez, y de Defensa, Walter Astudillo, así como los comandantes generales de los tres institutos armados, están viajando a Trujillo con personal especializado para reforzar la seguridad. Adrianzén también viajará a esa ciudad al mediodía.
