En su último reporte mensual, Credicorp Capital advirtió que el crecimiento proyectado de la economía peruana para este año, inicialmente estimado en 2,8%, podría reducirse a 2,3% si China no logra compensar el impacto de los aranceles impuestos por el nuevo gobierno de Estados Unidos. Daniel Velandia, economista jefe de Credicorp Capital, explicó que la economía peruana mostró un crecimiento cercano al 4% en su último reporte mensual, destacándose en comparación con otras economías de la región. Sin embargo, el crecimiento proyectado podría verse afectado por las políticas arancelarias de Estados Unidos y la caída del precio del cobre.
Donald Trump, durante su campaña, propuso un incremento de hasta el 60% en los aranceles de productos provenientes de China, desde el actual 24%. Desde que ganó las elecciones, ha prometido imponer nuevos aranceles del 25% a todos los productos procedentes de México y Canadá. Velandia señaló que el crecimiento de Perú dependerá en gran medida de la capacidad de China para compensar cualquier efecto negativo derivado de los aranceles de Estados Unidos. Si China no logra crecer al 4,7% y el precio del cobre cae 10 o 20 centavos de dólar, Perú podría crecer solo un 2,3%.
A pesar de estos riesgos, Credicorp mantiene una expectativa de crecimiento para Perú, respaldada por una baja inflación y una política monetaria favorable gracias a la buena gestión del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Perú ha logrado mantener una inflación baja, justo en la meta del 2%, lo que se refleja en el consumo de los hogares. Además, la confianza empresarial ha mejorado tras un difícil 2023, con un repunte del 11% en la inversión privada en el tercer trimestre de 2024, excluyendo los sectores de construcción y minería.
Otro factor clave en el desempeño económico del país ha sido la mejora en la confianza empresarial tras el difícil 2023, cuando el país enfrentó cinco choques económicos que afectaron a empresas y hogares. En el tercer trimestre de 2024, la inversión privada mostró un repunte del 11%, excluyendo los sectores de construcción y minería. No obstante, persisten problemas estructurales como la informalidad y la inestabilidad política. Por ello, enfatiza que el Perú necesita tasas de crecimiento de por lo menos el 4% para cerrar brechas y reducir la pobreza situada en 29%. Además, a pesar de la relativa estabilidad política actual, las elecciones del próximo año podrían generar incertidumbre que afectaría las decisiones de inversión.
Finalmente, Credicorp Capital prevé que la inflación subirá ligeramente “por un efecto estadístico y se ubicará en 2,5% hacia finales de año”, con una posible reducción de la tasa de interés del BCRP hacia el 4,25% en el segundo semestre (actualmente está en 4,75%), que dinamizaría la economía. Desde Credicorp anticipan que para este año se prevé un déficit fiscal de 2,6% con una corrección de 1 punto “que es bastante decente, pero que estará fuera del objetivo de la regla”, a pesar de la regularización del impuesto a la renta, mayores utilidades de las compañías, sobre todo de las mineras. “Esto implicaría que el Gobierno vuelva a pedirle al Congreso relajar las metas para que tengamos un mayor déficit”, sostiene Daniel Velandia. A su vez, el ejecutivo no descarta que se alcance nuevamente la meta en 2026. “Es probable que esté amenazado el cumplimiento”, sostuvo.
